Transformar el campo para acabar con la brecha digital que existe entre áreas urbanizadas y rurales es una prioridad europea y española con el objetivo de fomentar la igualdad de oportunidades tecnológicas, de comunicación y empleo.
En este sentido, el aumento del trabajo a distancia con la llegada de la COVID-19 provocó un trasvase de trabajadores de la ciudad al medio rural que ha acentuado la necesidad de reducir esa brecha. En 2019, solo el 4,8 % de los españoles teletrabajaba, según el Instituto Nacional de Estadística, mientras que esa cifra superó el 30 % durante los meses que duró el confinamiento. La digitalización rural conlleva también el impulso para emprender en sectores propios de este ecosistema como la agricultura y la ganadería, que se beneficiarían de contar con las infraestructuras tecnológicas necesarias para conseguir un salto de calidad.
Estado de la conectividad rural
Según el informe DESI 2021 que publica la Comisión Europea, España es el noveno mejor país de la Unión Europea en conectividad global, cayendo cuatro puestos frente al informe del año anterior. Y es que, aunque el documento de 2020 destacaba el despliegue de redes de fibra óptica –con una cobertura del 80 % en los hogares, muy por encima de la media de la Unión Europea (UE), que es del 34 %–, la puntuación en conectividad ha mejorado aún más, ascendiendo al tercer puesto en la Unión Europea.
Además, a pesar de que existen diferencias importantes entre zonas urbanas y rurales, España tiene un rendimiento especialmente alto en redes de muy alta capacidad, ya que están empezando a subsanarse las diferencias persistentes entre las zonas rurales y urbanas.
En lo que se refiere a otras velocidades, el informe ‘Cobertura de banda ancha en España en el año 2020’, publicado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, resalta que la banda ancha a 100 megabits por segundo (Mbps) alcanzó en 2020 al 88 % de la población y al 63 % en las zonas rurales. Es un incremento de 13 puntos respecto al año anterior. Esta cifra parece que seguirá mejorando, ya que la ‘Agenda España 2025’ ha fijado el objetivo de que el 100 % de la población tenga cobertura de 100 Mbps en 4 años.