Samsung, uno de los principales fabricantes de smartphones del mundo, estaría dando un giro decisivo en su apuesta por la inteligencia artificial. Tras integrar Gemini, el modelo de IA de Google, en su buque insignia Galaxy S24, nuevas filtraciones apuntan a que la compañía surcoreana planea romper esta alianza y adoptar una solución más ligera, rápida y especializada: el motor de Perplexity AI.
Este cambio no solo implica un ajuste técnico, sino una reorientación estratégica que tiene profundas implicaciones para el ecosistema Android y para el futuro de la inteligencia artificial en dispositivos móviles.
IA rápida, útil y controlada
Perplexity AI se ha posicionado como una alternativa emergente en el campo de los buscadores conversacionales. Su propuesta combina IA generativa con citación de fuentes fiables, lo que le ha valido el interés de grandes tecnológicas como Apple. Para Samsung, apostar por Perplexity supone ir más allá de un simple reemplazo: significa abrazar una filosofía centrada en la utilidad práctica, la privacidad del usuario y la velocidad de respuesta local.
Mientras Gemini sigue una lógica más centralizada, que depende de conexiones a la nube y modelos de gran tamaño, Perplexity ofrece una arquitectura más ágil, ideal para casos de uso cotidianos en móviles: búsquedas rápidas, respuestas directas, generación de contenido breve o navegación asistida con contexto.
Samsung quiere independencia
Este movimiento se enmarca en una estrategia más amplia de Samsung para ganar autonomía tecnológica. La compañía no solo diseña y fabrica sus propios smartphones, también produce chips avanzados, incluyendo memorias HBM (High Bandwidth Memory) clave para el entrenamiento y ejecución de modelos de IA.
Esta integración vertical le da margen para construir una plataforma de inteligencia artificial propia y diferenciada, alineada con las necesidades reales del usuario móvil: menos dependencia de terceros, más control sobre la experiencia y mejor integración entre hardware y software.
La apuesta por soluciones como Perplexity también permite a Samsung competir en un nuevo terreno: la experiencia asistida por IA personalizada, sin ceder espacio a Google ni a otras grandes tecnológicas.
La «desgoogleización» del ecosistema Android
Estamos ante una tendencia creciente: los grandes fabricantes quieren tomar el control de la capa de inteligencia artificial que intermedia entre el usuario y el sistema operativo. Samsung no es la única. Apple ya ha anunciado su propio sistema, “Apple Intelligence”, y otras marcas chinas como Xiaomi o Oppo están desarrollando sus propios modelos ligeros.
Este fenómeno podría marcar el declive del dominio absoluto de Google dentro del universo Android, que hasta ahora ha estado anclado en servicios como Google Assistant, Search o Gemini. El futuro parece dirigirse hacia asistentes inteligentes diseñados por y para cada fabricante, optimizados para sus dispositivos, con capacidades específicas y mayor foco en privacidad y rendimiento.
Samsung está trazando un camino propio en el mundo de la inteligencia artificial, apostando por alternativas como Perplexity AI frente a soluciones de terceros como Google Gemini. Este giro marca un cambio profundo en el ecosistema Android: más autonomía, velocidad, privacidad y control para los fabricantes… y más opciones para los usuarios.
El futuro de la IA en móviles ya no está en manos de unos pocos. Está fragmentándose, diversificándose y especializándose. Para quienes trabajan en estrategia digital, producto o marketing tecnológico, entender esta transición es clave.