¿Qué es un prescriptor?
Un prescriptor es aquella persona de la que se sirven las marcas para dar su imagen a un determinado producto o servicio, y de esta forma darle mayor credibilidad a la marca a la que representan.
Durante muchos años el uso de prescriptores estaba enfocado al testimonio de expertos o personalidades, que aportaban un nivel de confianza muy alto debido a su estatus y conocimientos, acerca de una materia concreta.
El prescriptor de la era del Social Media
Con la llegada de las redes sociales, estos paradigmas están cambiando completamente. Los nuevos prescriptores en la era del Social Media, son los Influencers. Blogueros, «instagramers» y «youtubers» inundan la red, convirtiéndose en los nuevos embajadores de las marcas.
Estos Influencers empezaron siendo simples Brand Advocates, consumidores de una determinada marca que, de manera gratuita y por simple pasión por la marca, hablan de las bondades de dicha marca y de sus productos favoritos.
Los Brand Advocates más conocidos son los fervientes seguidores de Apple. Su amor por la marca es tal, que se han convertido en todo un culto que defiende con uñas y dientes todo lo relacionado con ella.
Los expertos, por el contrario, han quedado relegados a un segundo plano. La razón fundamental es el cambio generacional. Los millenials han tomado las riendas del mercado y son el target principal de las marcas. Son consumidores mucho más exigentes y críticos, y reclaman la humanización de las marcas. La visión de las marca desde un punto de superioridad, respecto al consumidor de a pie, ha quedado obsoleta.
Las nuevas generaciones quieren prescriptores con los que puedan conectar y empatizar. Alguien con el que sentirse identificados y que les transmita sinceridad al hablar de una marca concreta. Sin embargo, ¿estamos entrando en un círculo vicioso?
Cuando los Brand Advocates comenzaron a monetizar sus opiniones, pasaron a convertirse en Influencers. Estos, dependen del dinero que las marcas les pagan. Unas de las razones por las que los expertos están infravalorados, es por el hecho de ser pagados grandes sumas de dinero por representar a una marca. En ese caso, ¿son los Influencers diferentes a los expertos? Al fin y al cabo, aunque estos decidan con que marcas quieren o no trabajar, sus opiniones están muchas veces sesgadas por el simple hecho de cobrar por ellas.
Lo que está claro es que estamos ante un nuevo tipo de publicidad que engancha por el hecho de no parecerlo. Es una publicidad “sin guiones”. Sin embargo, estamos rodeados de fotos de Instagram en las que la publicidad está encubierta en forma de experiencias. Los Influencers disfrutan de sus viajes y casualmente una determinada marca alcanza el encuadre de la cámara. ¿Hasta qué punto estamos entrando en la publicidad subliminal con el fenómeno influencer?
Las celebridades se han unido al sector Influencers, y se están adaptando a la nueva era digital para llegar mejor a sus seguidores. Este hecho está generando roces entre los Influencers surgidos del anonimato. Estos consideran que es poco lícito, ya que se están nutriendo de una fama obtenida por otros logros, ajenos al sector al que están intentando entrar.
Lo que está claro es que las cifras y los estudios de mercado ya no venden a nivel publicitario. Los consumidores no quieren saber el volumen de ventas del producto “x”. Quieren saber cuántos likes tiene la cuenta de su influencer favorito y comprar el producto que este está usando.
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